La movilidad es un aspecto complejo de nuestra condición física que podemos confundir con flexibilidad, pero no son lo mismo. La falta de movilidad nos puede limitar tanto a la hora de hacer deporte como en nuestra vida diaria, incrementando el riesgo de lesión. Por este motivo es un aspecto que deberíamos trabajar en nuestras sesiones de entrenamiento para mejorar nuestro progreso y realizar una buena técnica en los ejercicios.
Sabiendo la importancia que tiene la movilidad tanto en nuestros entrenamientos como en nuestra vida diaria, en este articulo veremos qué es la movilidad y por qué no es lo mismo que la flexibilidad y cómo trabajarla para mejorarla (Leer más).
¿QUÉ ES LA MOVILIDAD?
La movilidad es la capacidad de mover una articulación de forma activa utilizando nuestros músculos y no una fuerza externa.
Por otro lado, tenemos la flexibilidad que consiste en la capacidad de elongar un tejido, pero de forma pasiva, es decir, con ayuda externa y que este sea capaz de volver a su estado normal.
Para entenderlo mejor, la movilidad es algo que podemos controlar de forma activa y la flexibilidad no.
El rango de movimiento que seamos capaces de controlar será el que utilizaremos durante los ejercicios que hagamos en nuestro entrenamiento y durante la vida diaria.
La falta de movilidad es una forma de protección de nuestro organismo, de tal forma que restringe movimientos en rangos que no podemos controlar.
Es decir, si la movilidad de alguna articulación está restringida es porque nuestro sistema nervioso considera que no somos capaces de controlar el movimiento completamente.
Si nuestro cuerpo no está acostumbrado a realizar determinados gestos, lo más seguro es que cuando los hagamos con algún tipo de carga nos lesionemos.
Pero no te preocupes, porque la movilidad se puede mejorar y existen varios métodos, incluyendo el entrenamiento de fuerza
CÓMO MEJORAR LA MOVILIDAD DE NUESTRAS ARTICULACIONES
La movilidad la podemos mejorar utilizando distintos métodos, y entre ellos se encuentra de los más importantes y más mencionados en el blog: el entrenamiento de fuerza.
ENTRENAMIENTO DE FUERZA
El entrenamiento de fuerza por si solo mejora nuestra movilidad al realizar movimientos con cargas externas que tenemos que tenemos que controlar.
Por ello, si no has hecho ejercicios de fuerza antes, al empezar notarás que tu movilidad mejora cuando llevas un tiempo realizando este tipo de entrenamiento.
El hecho de realizar movimientos que no realizamos muy frecuentemente en nuestra vida diaria contribuye a mejorar nuestra movilidad.
Por ejemplo, no solemos hacer muchas sentadillas profundas con cargas a lo largo de un día normal, y sino las realizamos en nuestro entrenamiento nuestra movilidad de cadera se vería reducida.
Igual ocurre con los hombros, otra de las articulaciones que más pérdida de movilidad y riesgo de lesión tiene.
Pero no solo existe el entrenamiento de fuerza como método para mejorar nuestra movilidad, si quieres conocer más echa un vistazo a este artículo.
MITOS SOBRE LOS ESTIRAMIENTOS Y LA MOVILIDAD
Hay muchos mitos alrededor de los estiramientos y la movilidad en el ejercicio. Veremos los más comunes y aquellos que más quebraderos de cabeza generan.
“LOS ESTIRAMIENTOS PREVIOS AL EJERCICIO REDUCEN EL RIESGO DE LESIONES”
La realidad es que no se ha demostrado que estirar antes reduzca el riesgo de lesiones, de hecho podría hasta incrementarlo al llevar al músculo a su punto máximo de estiramiento cuando lo que vamos a hacer es justo lo contrario, ejercicios donde vamos a contraer nuestros músculos de forma potente.
«ESTIRAR MÁS TE HARÁ MÁS FLEXIBLE”
Estirar de forma estática puede aumentar de forma temporal nuestra movilidad, pero no nos ayudará a mejorarla a largo plazo.
«TENGO LOS ISQUIOS ACORTADOS”
Seguro que has escuchado esta frase alguna vez. Y la verdad es que los isquios no se «»acortan»» como tal, sino que su encogimiento se debe a que nuestro sistema nervioso considera que nuestra cadera no es estable y por seguridad acorta el rango de movimiento.
«NO ES NECESARIO MOVILIZAR SI NO HACES EJERCICIO INTENSO”
La movilidad siempre se debe trabajar y especialmente si no haces ningún tipo de ejercicio físico ya que poco a poco tu movilidad se irá limitando a los movimientos que hagas en tu vida diaria. También es muy importante en el caso de las personas mayores.
LA MOVILIDAD ES ESENCIAL
Llegados a este punto te habrás dado cuenta de que la movilidad es esencial tanto para la vida diaria como para el ejercicio o deporte que practiques, evitando lesiones y mejorando nuestra calidad de vida.
Si no tienes claro cómo empezar a mejorar tu movilidad, empieza con ejercicios de fuerza sencillos y déjate asesorar por un profesional del deporte.